martes, 3 de mayo de 2011

El día que cambió le mundo

¿Se acuerdan de hace 10 años? Yo sí, estaba en secundaria y era muy feliz con mi vida: escuchaba música en mi discman, iba a tardeadadas, leía revistas, bailaba, veía fútbol, jugaba voleibol en recreo con mis amigos, comía mucha fruta y me negaba a usar faldas, vestidos, blusas de tirantes y maquillaje. Me pasaba los ratos libres viendo Sabrina y jugando en la computadora Sim City o Civilization. 

Desde entonces muchas cosas han cambiado y muchas no, pero recuerdo que un martes de septiembre de 2001 el mundo cambió radicalmente. Me acuerdo, perfecto de cómo fue ese día. Me acuerdo que me asusté muchísimo y lloré mucho, no por tristeza, sino porque estaba aterrada, no podía creer lo que estaba pasando y sentía como si fuera a terminarse mi mundo en ese momento. 

Poco a poco con el paso de los días, la vida cotidiana empezó a regresar a una "normalidad" rara en la que los árabes se volvieron malos, raros y locos, en donde para volar en avión fuera del país había que llegar 3 horas antes al aeropuerto, en donde los cortauñas, los cutters, las navajas y los líquidos, quedaron absolutamente prohibidos en los aviones. 

Poco a poco empezaron a mostrarse las secuelas del 11/S, una nueva guerra y un orden mundial distinto: el fortalecimiento de la Unión Europea, el surgimiento de nuevas potencias...después la crisis mundial que nos impactó a todos. 

El domingo Estados Unidos terminó con la vida del terrorista detrás de los atentados...no se que sentí. Primero me dio gusto ver a tanta gente contenta, después reflexioné sobre lo macabro de la situación...el júbilo desde el odio no está bien. Me dio miedo en pensar en las represalias que pudieran tomar los terroristas, pero lo peor es que sentí una esperanza infundada en que las cosas volvieran a ser como antes.

  

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